Consejos para padres: Cómo lidiar con un niño terco
Los niños comienzan a mostrar terquedad a medida que crecen para demostrar su asertividad. Los padres suelen frustrarse para eso, pero es importante mostrar comprensión y paciencia. Esto no solo ayudará a resolver los conflictos, sino que también mejorará sus habilidades de comunicación.
Entonces, es esencial respirar profundamente y mantener la compostura. Debes comprender la perspectiva del niño y validar sus sentimientos. Si te resulta difícil criar a un niño testarudo, te compartimos ahora esta guía completa.
- Parte 1: Entendiendo la terquedad en los niños
- Parte 2: Las señales de terquedad en los niños
- Parte 3: La importancia de la paciencia de los padres
- Parte 4: Primer paso para tratar con niños tercos: Asegurar una comunicación efectiva
- Parte 5: Segundo paso: Establecer expectativas claras
- Parte 6: Tercer paso: Refuerzo positivo y recompensas
- Parte 7: En situaciones más severas: dar tiempos de espera
- Parte 8: Buscar ayuda profesional
- Parte 9: Crianza diaria: Utilizar herramientas de terceros para monitorearlos
Entendiendo la terquedad en los niños
La terquedad de un niño se trata de mostrar una fuerte resistencia a escucharte. Un niño terco de 3 años deja de cooperar o seguir instrucciones. Además, muestran desafío y resistencia, y quieren hacer las cosas solo a su manera. Es una parte normal del desarrollo infantil, lo que significa que muestran terquedad durante la infancia y los años preescolares.
En la primera infancia, comienzan a poner a prueba los límites y a mostrar sus preferencias. Además, desde los tres hasta los seis años, los niños se vuelven más autosuficientes, razón por la cual empiezan a desafiar las reglas. Como padres, necesitamos comprender las razones detrás de la terquedad de los niños de dos años para poder manejar mejor la situación. Algunas razones comunes incluyen:
- Cuando los niños empiezan a crecer, tienen un deseo de independencia y autonomía. Por eso, el comportamiento terco es su forma de ejercer control.
- Los niños en crecimiento no tienen las habilidades de comunicación o el vocabulario para expresar sus emociones y necesidades, por lo que los padres no siempre pueden entenderlos.
- Los niños comienzan a probar comportamientos para aprender cuál es el comportamiento aceptable. Muestran terquedad para ver hasta dónde pueden empujar los límites.
Las señales de terquedad en los niños
Hay diferentes señales de comportamiento de terquedad en los niños. Como padres, es importante conocer estas señales para entender las razones detrás de un bebé terco. Algunas de estas señales incluyen:
Fuerte independencia
Los niños tercos siempre tienen un rasgo de independencia. No aceptan orientación o ayuda. Además, insisten en hacer las cosas a su manera, incluso si te parece inseguro o impráctico.
Berrinches
Los berrinches son un ejemplo clásico de terquedad. Cuando están en una situación que no les gusta, tienen explosiones emocionales y comienzan a gritar en voz alta. Además, pueden haber muchos golpes, gritos y patadas.
Enojo
Si te preguntas, "¿Por qué es tan terca mi hija?", podría ser debido a la ira acumulada dentro de ella. Esto es porque los niños tercos muestran su frustración y enojo contestando de manera desafiante. Adicionalmente, siempre tienen una actitud de "no me importa" frente a padres y maestros.
Culpar a otros
Cuando los niños se vuelven tercos, empiezan a culpar a otros por sus errores. En la mayoría de los casos, es porque no quieren enfrentar las consecuencias de sus acciones.
Como padre, es importante tener en cuenta que estas son señales de terquedad. Sin embargo, estas señales también pueden ser causadas por ansiedad y estrés. Aun así, es importante abordar estas señales para asegurar un manejo efectivo del comportamiento.
La importancia de la paciencia de los padres
Al preguntarte cómo lidiar con un niño terco, necesitas comprender la importancia de la paciencia, aunque esto parezca desafiante. Hay que entender que los niños aprenden observando el comportamiento de sus cuidadores y padres. Entonces, cuando te mantienes tranquilo ante un berrinche, les enseñas que la calma es la respuesta.
Esto les enseña que es importante regular sus emociones. Como padre, al mantenerte calmado, les demuestras que pueden enfrentar situaciones difíciles sin mostrar enojo. Lo mejor es que esto construye resiliencia en los pequeños. Podrán superar desafíos y frustraciones de una manera positiva y constructiva.
Por eso es crucial comprender la importancia de la paciencia. Esto solo es posible cuando entiendes las consecuencias de perder la calma, como por ejemplo:
- Mostrar frustración puede intensificar la terquedad en los niños. Como resultado, se vuelven más resistentes, lo que puede llevar a una lucha de poder.
- Los niños se vuelven más angustiados emocionalmente. Esto puede tener efectos negativos en su bienestar emocional y autoestima.
- Perder la calma puede generar brechas en la comunicación. Los niños se retraen y dejan de compartir sus pensamientos o sentimientos contigo, lo que resulta en problemas de entendimiento.
Primer paso para tratar con niños tercos: Asegurar una comunicación efectiva
La comunicación efectiva es una de las mejores formas de manejar a un niño terco. Esto se debe a que podrás entender su perspectiva y reconocer sus necesidades emocionales. En caso de que te cueste asegurar una comunicación efectiva como padre, compartimos algunos consejos:
Fuerte independencia
Escuchar activamente los sentimientos de tu hijo es la manera más sencilla de valorar sus emociones y pensamientos. Así que, cuando comiencen a hablar contigo, debes prestarles atención completa. No los interrumpas ni empieces a dar soluciones de la nada. En pocas palabras, simplemente escúchalos activamente.
Mostrar empatía
Si aún te resulta difícil entender cómo lidiar con niños tercos, te recomendamos mostrar empatía. Debes comprender sus puntos de vista, emociones y perspectivas. Demuestra empatía reconociendo sus esfuerzos. Ten en cuenta que no siempre estarás de acuerdo con ellos, pero no puedes invalidar sus sentimientos.
Segundo paso: Establecer expectativas claras
¿Sabías que los niños comienzan a entender y aprender palabras durante el primero y segundo año de vida? Por eso, como padres, es importante establecer expectativas claras con ellos. Esto se debe a que establecer expectativas proporcionará estructura y fomentará la comprensión.
Además, puede ayudar con el manejo del comportamiento. Para empezar, debes ser consistente al establecer expectativas.
Cuando estás tratando con un niño pequeño o en edad preescolar, debes establecer expectativas apropiadas para su edad. Por ejemplo, puedes decirles que no pueden tocar cosas peligrosas.
Asimismo, asegúrate de que las instrucciones sean fáciles de entender, simples y breves. Se recomienda que los involucres en el proceso de establecer expectativas para que se sientan parte del proceso. De hecho, esto les ayudará a entender mejor las razones detrás de tus expectativas.
Tercer paso: Refuerzo positivo y recompensas
El refuerzo positivo es una de las mejores herramientas para cambiar el comportamiento de tus hijos, incluso de los más tercos. Para este propósito, tienes que recompensarlos y reconocer sus comportamientos.
El refuerzo positivo puede ayudar a construir autoestima - estarán motivados a repetir esos comportamientos también. De hecho, puede contribuir a crear un ambiente positivo y de cuidado en casa (¿no es esto algo que a todos nos gusta?).
En segundo lugar, debes mostrar consistencia al implementar las recompensas. Por ejemplo, si prometiste una recompensa por completar las tareas, debes entregarla para asegurarte de que no te desafíen nuevamente.
En situaciones más severas: Tiempo fuera
Los tiempos fuera se utilizan como castigo por comportamientos indeseables en los niños. Esto ayuda a sacar a los pequeños de una situación o entorno específico donde están mostrando un comportamiento negativo. Puedes usar los tiempos fuera cuando tus hijos muestren comportamientos agresivos o hagan rabietas. Además, cuando tengan comportamientos disruptivos, como interrumpir tus conversaciones con tu pareja, puedes darles un tiempo fuera.
Buscar ayuda profesional
Si aún estás teniendo dificultades para lidiar con un niño de dos años terco y sientes que no puedes manejar la situación, recomendamos buscar ayuda profesional, especialmente si su comportamiento comienza a interrumpir su vida diaria.
Puedes llevar a tu hijo a un terapeuta conductual, ya que ellos pueden entender las causas subyacentes de su comportamiento.
Los terapeutas y consejeros también pueden crear estrategias personalizadas para mejorar su comportamiento. Además, utilizan diferentes habilidades de afrontamiento adaptadas a tus pequeños.
Crianza diaria: Utilizar herramientas de terceros para monitorearlos
Los padres creen que mostrar "Baby Shark" y "Peppa Pig" es inofensivo, pero lo que ven tus hijos puede influir en su comportamiento.
Entonces, incluso si tus hijos tienen solo treinta minutos de pantalla, recomendamos usar AirDroid Parental Control para limitar cuánto tiempo pasan en el teléfono Android y supervisar lo que miran.
Puedes establecer límites en aplicaciones y tiempo de pantalla, y monitorear palabras clave, lo que significa que es menos probable que accedan a contenido perjudicial para ellos.
También puedes:
- Reflejar en pantalla lo que está viendo tu hijo en ese momento.
- Recibir notificaciones del teléfono de tu hijo.
- Rastrear la ubicación actual de tu hijo.
- Establecer geocercas y recibir alertas cuando tu hijo entre o salga de lugares específicos.
Palabras finales
En este punto, debes saber cómo lidiar con un niño terco. Ten en cuenta que este comportamiento no desaparecerá en un día, por lo que tienes quieren ser consistente al implementar reglas. En ocasiones, tendrás que ser firme porque tu paciencia será puesta a prueba. Sin embargo, si nada funciona, no dudes en llevar a tu pequeño al terapeuta.
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